(Esto es un fragmento de mi informe de práctica)
En los meses que pasé en el Bosque Santiago, he visto que algo muy especial, y de alta importancia, se realiza allá. Es mi opinión fuerte que el Centro de Educación Ambiental merezca un estado permanente en el Parque Metropolitano, aunque no sea la función más económica para el espacio. El tema me apasiona porque me importa la sustentabilidad de nuestro planeta, me importa el cuidado de los tesoros naturales que existen en Chile, y me importa el bienestar físico, mental, y espiritual de los niños de Santiago y del mundo. En la secuencia de las Rutas Sustentables, los estudiantes de todas edades aprenden nuevamente a usar todos sus sentidos. Aprenden a caminar en terreno sin concreto, a oler los eucaliptos, a sembrar con sus propias manos en la tierra, a escuchar los pájaros, y a fijarse de su entorno. Aprenden a maravillar del silencio, y de vez en cuando, en momentos preciosos, su curiosidad de la naturaleza supera su deseo de enviar un mensaje en el celular. ¡Qué notable, hoy en día, tener una experiencia afuera de una pantalla, una experiencia que requiere el uso de cada sentido! Es un aprendizaje esencial, y en la época moderna, perdido.
La mayoría de los niños que vienen no tienen experiencia caminando por senderos en el bosque. No hacen actividad física, y por lo tanto, no tienen salud adecuada. Es absolutamente esencial que los niños de Santiago tengan la oportunidad de moverse fuera de una sala, fuera de cuatro paredes. El programa educativo en el Bosque Santiago deja que los estudiantes aprendan pero también jueguen. Es nutrimiento para sus cuerpos tanto como sus mentes.
Además de los beneficios para los individuos que vienen, la educación que se realiza en el bosque tiene mucha importancia para el desarrollo sustentable de Santiago y el país. En el bosque, los estudiantes experimentan visceralmente cómo cuidar por el medio ambiente, y por qué es importante hacerlo. Cuando observan la belleza del bosque y las aves que lo usan como casa, entienden mejor la razón por la cual es importante reciclar el papel. Cuando miran una vicuña ojo al ojo, quieren protegerla. Cuando tocan el agua fresco de un arroyo, entienden que todo es un ciclo en que participamos, que necesitamos preservar. Cuando ven el esmog de la ciudad desde un mirador, quieren mejorar la calidad de aire. Cuando aprenden los nombres de sus árboles nativos y sus características especiales, se dan cuenta de que son parte de su identidad chilena, y que deben protegerlos y respetarlos. No se puede enseñar estas cosas en una sala o en un texto. Es imposible cuidar por la naturaleza sin conocerla y amarla. Este aprendizaje no sólo es importante para ser más “verde”: es cuestión de la integridad y el futuro del país.
En los Estados Unidos estamos ahora tratando de arreglar un problema conocido como “Nature Deficit Disorder.” Hay estudios que muestran el daño al cerebro que ocurre cuando una persona no tiene exposición al aire libre. Tenemos mucha contaminación, problemas ambientales, y epidémicas de salud. Tenemos una generación que pasa su vida frente de una pantalla. Yo creo que la solución viene de la educación ambiental en el aire libre. Primero viene la alegría y la curiosidad. Después, conocimiento. Y finalmente, viene un deseo de cuidar por la tierra. El bienestar de Chile y su gente depende de experiencias y programas como los que se realizan en el Bosque Santiago, ya que más de un tercio de la población chilena vive en la ciudad de Santiago. En mi opinión, el Parque Metropolitano debería expandir este centro de educación ambiental para servir aún más estudiantes. Me he encantado tener la experiencia de trabajar allá con los niños y los otros empleados, y regreso a California con la esperanza de que la nueva generación del mundo pueda mejorar el mundo, con las herramientas necesarias y un poco de inspiración.
La comunidad de empleados del Bosque Santiago realmente era una familia para mí. Cada persona hizo un esfuerzo para enseñarme todo que podía: las plantas nativas y los temas ambientales, los problemas sociales del país, los estilos de educación, los chistes y chilenismos, y mucho más. Siempre me disfruté durante mis horas en el bosque, y venía siempre cuando podía – mucho más que lo mínimo para mis créditos universitarios. El bosque es un oasis dentro de la ciudad de Santiago, y me dio mucha alegría pasar tanto tiempo entre los pájaros y árboles, arriba de la contaminación y caos que quedan abajo. Ahora yo sé que la educación ambiental es algo que quiero seguir; me da mucha satisfacción y un sentido de plenitud. La habilidad de enseñar los temas ambientales en español es algo que ciertamente voy a utilizar en el futuro. Aprendí más en esta práctica que en ningún otro componente de mí tiempo de intercambio.
Hay que sembrar la ciudad. Hay que reforestar la ciudad con árboles nativos y huertos, llenando cada espacio con vida. Hay que reforestar la ciudad con maravilla e imaginación, con curiosidad y conocimiento. Juntos crecemos, juntos vivimos. Hay que sembrar.
------------------------------------------------------------------------------------------
English translation! (this is an excerpt from my internship report)
In the months that I spent in Bosque Santiago, I have seen that something very special and highly important happens there. It is my strong opinion that the Environmental Education Center deserves a permanent space in the Metropolitan Park of Santiago, even if it's not the most economical use for the space. I am passionate about this issue because I care about the sustainability of our planet, because I care about the protection of the natural treasures of Chile, and I care about the physical, mental, and spiritual well-being of the children of Santiago and the world. In the Sustainable Pathways sequence, students of all ages learn once again to use all of their senses. They learn to walk on terrain without concrete, to smell the eucalyptus, to plant seeds with their own hands in the dirt, to listen to the birds, and to notice their surroundings. They learn to marvel at the silence, and every once in a while, in precious moments, their curiosity for nature overcomes their desire to send a text message. How remarkable it is, nowadays, to have an experience away from a screen, an experience that requires the use of every sense! It is a learning experience that is essential, and in modern times, lost.
The majority of the kids who come don't have experience walking on forest trails. They aren't physically active, and so they don't have adequate health. It is absolutely essential that Santiago's youth have the opportunity to move around outside a classroom, outside of four walls. The educational program at Bosque Santiago allows students to learn but also to play. It is nourishment for their bodies as much as their minds.
And besides the benefits for the individuals who come, the education that occurs in the forest is very important for the sustainable development of Santiago and the country. In the forest, students viscerally experience how to care for the environment, and why it's important to do so. When they observe the beauty of the forest and the birds that use it as their home, they understand why it's important to recycle paper. When they look a vicuña in the eye, they want to protect it. When they touch fresh water in a stream, they understand that everything is a cycle in which we participate, that we need to preserve. When they see the smog of the city from a lookout point, they want to improve the quality of the air. When they learn the names of native trees and their special characteristics, they realize that these trees are part of their identity as Chilean, and they need to protect and respect them. You can't teach these things in a classroom or textbook. It is impossible to take care of the nature around us without knowing and loving it. This lesson is not just important for being more "green"- it's a matter of the integrity and future of the country.
In the United States we are now trying to fix a problem known as "Nature Deficit Disorder." There are studies that show the damage to the brain that occurs when someone doesn't have access to the outdoors. We have so much contamination, environmental issues, and health epidemics. We have a generation that passes its life in front of a screen. I believe that the solution comes from outdoor environmental education. First comes happiness and curiosity. Then, understanding. And finally, comes a desire to take care of the earth. The well-being of Chile and its people depends on experiences and programs like those that take place in Bosque Santiago, since more than a third of the Chilean population lives in Santiago. In my opinion, the Metropolitan Park of Santiago should expand this center of environmental education to serve even more students. I have loved the experience of working their with the kids and other employees, and I return to California with the hope that the new generation of the world can improve that world, with the necessary tools and a little inspiration.
The community of staff at Bosque Santiago was truly a family for me. Every single person made an effort to teach me all that he or she could: native plants and environmental topics, the country's social issues, styles of education, jokes and chilenisms, and so much more. I always enjoyed my hours there in the forest, and I came as much as I could - much more than the minimum for my university credit. The forest is an oasis in the city of Santiago, and it gave me so much joy to pass so much time among the birds and the trees, above the contamination and chaos that lies below. Now I know that environmental education is something I want to pursue; it gives me a sense of fulfillment. The ability to teach environmental themes in spanish is something that I will surely use in the future. I learned more in this internship than I learned in any other aspect of my time abroad.
We've got to seed the city. We've got to reforest the city with native trees and food gardens, filling every space with life. We've got to reforest the city with wonder and imagination, with curiousity and knowledge. Together we grow, together we live. We´ve got to plant seeds.
No comments:
Post a Comment